Glamorama
Ricardo Arjona sobre la Quinta Vergara hora antes del terremoto del 2010. IMAGEN DE ARCHIVO TOMADA DE PANTALLA / CANAL 13

La exigencia clave de Arjona que salvó al público de la Quinta Vergara del terremoto de 2010

Autor: Carlos Zúñiga / 14 diciembre, 2016

Pasadas las 3 de la mañana del sábado 27 de febrero de 2010 Chile sufrió uno de los peores terremotos de su historia. La tragedia fue grande y lamentable. Y pudo ser peor.

Esa noche de viernes la Quinta Vergara estaba repleta de fans de Ricardo Arjona, la estrella guatemalteca que cerraría el espectáculo. Era una presentación que iba para largo. Posiblemente hasta las tres o más de la madrugada.

Si el terremoto hubiese pillado a la gente en la Quinta Vergara las probabilidades de víctimas eran considerables. Sin embargo, Ricardo Arjona pidió no cerrar el show. Era una exigencia en la que no dio pie atrás.

Finalmente el deseo del autor de Pingüinos en la Cama logró el cambio en el programa, acortando considerablemente la extensión de esa noche festivalera. Cuando el terremoto azotó el país, la Quinta Vergara estaba sin público.

Soledad Onetto, quien animó el Festival junto al inolvidable Felipe Camiroaga, recordó en el matinal de Mega la exigencia de Arjona. Estas fueron sus palabras en Mucho Gusto:

Soledad Onetto: “Los grandes, grandes de la parrilla (del Festival de Viña), se negocian. Ricardo Arjona fue tan así, que Ricardo Arjona no abría la última noche que nosotros hicimos del Festival, no la abría Ricardo Arjona. Quien la abría era La Noche”

Ivette Vergara: “Probablemente los grandes números sí la negocian, pero los humoristas en el fondo…”

Lucho Jara: “¿Sabes por qué se hizo así? Por lo que tú dices. Porque los artistas que venían de afuera tenían demasiado en jaque a la organización. Y te sale un gallito…”

Kathy Salosny: “¿Y qué hizo Arjona?”

Onetto: “El pidió abrir en vez de cerrar. O ir de segundo, tercer número. Y lo que hizo, básicamente, además de salvarnos, porque esa jugada nos salvó de que no tuviésemos la Quinta repleta, llena de público en el momento del terremoto, lo que él dijo fue ‘yo abro’.

«Y no hubo posibilidad, dos días antes de tenerlo ahí, de negociar con él. Y La Noche también dijo ‘yo abro’. Entonces había un gallito. ¿Cómo hacemos para elegir el número que va a abrir? Y segundo, proteger lo más importante, que era la competencia internacional, porque tenía que ir entre…”

Jara: “Pero tienes razón, Soledad. Por eso mismo que cambió el predicamento de la organización. Yo hablo desde la experiencia personal. Yo luché muchísimo por no cerrar, porque al otro día tenía que hacer el matinal. Dije ‘qué lata’. Finalmente yo accedí. Pero se constituye hoy como poco flexible: Un número fuerte, un humorista y un número de cierre, que puede ser de baile o chileno”

Vergara: “Está pensado en un programa de televisión”

Onetto: “Pero dejen contarles qué pasó. Se produce este gallito hasta tal punto que en la reunión de las doce de ese día, los organizadores nos dicen: ‘animadores, no queríamos preocuparlos, pero les tenemos que contar algo, que tenemos un problema el día de hoy’. ‘¿Qué hacemos?’. ‘Estamos entre La Noche y Ricardo Arjona. Ambos quieren abrir. ¿Qué vamos a hacer con esta situación?’. Se resuelve la situación finalmente. La Noche cede. Arjona sube. Y eso permite…»

Salosny: “Disculpa, Sole, ¿quién permite eso?”

Onetto: “La organización”

Vergara: “¿El canal a cargo más la Municipalidad?”

Onetto: “Sí, en conjunto. El comité organizador en conjunto. ¿Qué pasa ahí? Abre Arjona. Pegamos La Noche y desprotegemos la competencia internacional. Cuando se produce la competencia internacional, ya no hay nadie del público, nadie, solo nuestras familias”.