¿Por qué se emocionó tanto Américo?
Dos amigos sensibles y una carta. Eso basta para provocar un momento emotivo. Así sucedió ayer en el matinal de Mega con Américo –MIRE AQUI EL VIDEO-.
El cantante de Que Levante La Mano llegó a Mucho Gusto para presentar el tema Una Vida Contigo, junto a María Colores. Pero en el estudio Lucho Jara lo soprendió con la carta de Fernando Solabarrieta.
El artista y el comentarista deportivo son muy cercanos. Tienen un grupo, los amigos de Chicureo, que además integran Douglas e Iván Zamorano. Entonces, en medio de la campaña #QueVuelvanLasCartas, del espacio de la señal de Vicuña Mackenna, le pidieron al marido de Ivette Vergara que le escribiera a Américo desde Rusia, donde se encuentra realizando una misión laboral. Y obviamente que el cantante se conmovió. Estas fueron sus palabras y la lectura de la misiva:
Américo: «Si me veo medio, más que sensible, medio llorón, la verdad es que me importa nada, porque me interesan más lo amigos y las palabras. (La carta de Fernando) Dice: ‘Hola Mingo querido…’ Sabes que del grupo de amigos, el único que me dice ‘Mingo querido’, y por eso reconozco de inmediato que es Fernando cada vez que me llama.
«Dice: ‘Hola Mingo querido, te escribo desde Moscú, donde estoy reporteando por unos días. He pensado mucho qué escribir desde que supe que tenía esta linda oportunidad. La distancia ayuda a poner las cosas en contexto y la nostalgia invade espacios. Por eso decidí escribirte desde el corazón y el recuerdo. El recuerdo que me transporta a las Jornadas Magallánicas y ese gesto de enorme generosidad que tuviste para acompañarme en ese momento tan especial.
‘No nos conocíamos, pero yo te admiraba mucho y desde ese instante mucho más. A partir de ahí, no solo conocí a un artista excepcional, sino que a una persona maravillosa, sensible, generoso, divertido, leal.
‘Supe con inmensa alegría que estábamos llenos de coincidencias y quise ser tu amigo. Desde entonces agradezco profundamente que la vida nos haya regalado muchos momentos tan lindos junto a nuestras familias. Los asados de Douglas, las cenas donde Iván, los almuerzos temáticos de con el Flaco Olarra y las fiestas en la casa de nuestro querido Alex, ese hermano querido que se fue tan pronto.
‘Han sido muchas las emociones, las alegrías y también los dolores, y en todo hemos estado juntos. Por eso ahora quiero decirte gracias. Gracias por quererme, por estar cuando lo necesito y por regalarme tantos recuerdos lindos que me acompañan siempre.
‘Te quiero, Mingo querido. Que la vida siga regalándonos alegrías para nuestros hijos y que nuestro camino siga siendo el mismo de siempre. Te quiero, mi guacho querido. Fer’. Eh… ¡Maravilloso!”.
