Glamorama
Luli en una imagen de archivo tomada del Twitter @chilevision

El terror de Luli a que le explotaran los implantes de silicona en el avión!

Autor: Cristián Farías Ravanal / 5 octubre, 2016

Se suman las versiones y relatos sobre el viaje más difícil de Luli. La modelo Nicole Moreno sufrió una fuerte crisis de pánico a bordo del avión que la trajo de vuelta a Santiago desde Rio de Janeiro, el domingo pasado.

La actual reina del Festival de Viña se puso a gritar, forcejeó con la tripulación, anunciaba que algo malo iba a pasar, que se iba a morir. Y, de acuerdo a los relatos más extremos de la situación, Luli advertía que le iban a explotar los implantes de silicona, debido al mito injustificado de que, debido a la presión de la cabina, los implantes mamarios pueden reventar. Además, Ignacio Gutiérrez repetió en SQP –MIRE AQUI EL VIDEO– que Nicole quería abrir la puerta del avión mientras estaba en el aire.

El programa de farándula de Chilevisión citó a dos personas que aseguraron que venían en el mismo vuelo de LATAM. Este fue el testimonio de una mujer a quien solo se identificó como «Tamara»:

«Yo venía en el avión, estaba en la fila tres y caché que venía Luli, porque la vi en el duty free y como que cruzamos un par de palabras. Después me subí al avión. Me quedé dormida y despierto por un grito. Veo que ella estaba intentado entrar a la cabina. Hay una especie de cortina y cruzó eso. Un pasajero la agarró y la tiró a un asiento.

«Un tripulante la trató de calmar y le ofreció un vaso de agua. Ella le dijo ‘¡no! ¡Me quiero morir! Y si yo te digo que me quiero morir, es verdad, y sé por qué te lo digo’. Algo así.

«Cuando dijo que se quería morir, no sé si yo malinterpreté, pero dijo que tenía un presentimiento. La cosa es que estaba generando un pánico colectivo.

«Se le acercó una señora, de un metro y 50, chiquitita, y algo le dijo. Y Luli reaccionó y le respondió ‘¡y quién eres tú para venir a decirme!’. Le habló en la cara. Le gritó. Levantó la voz a otro nivel.

«Aterrizamos y nos hicieron esperar más de lo normal. Llamaron a seguridad. Ella de nuevo empezó a armar show. La gente se alteró y empezó ‘nos queremos bajar’. Llevábamos unos 20 minutos arriba del avión y ya estábamos en tierra. La gente comenzó a reaccionar, a pifiar, ‘¡y fuera! ¡y fuera!’.

«Luli dijo ‘¡qué viva la vida!’. Algo así. Levantó los brazos y la toda la gente ‘¿qué onda esta mina?’. Gritaba, pensaba que estab en un escenario, hablaba súper fuerte. Decía ‘no sé a quién le hablo, no sé por qué digo esto. Me nace. Tú, que estás escuchando, perdóname, te amo y gracias’. Lo repetía».

En en tanto, la panelista Paulina Rojas detalló el testimonio de otro pasajero, quien fue identificado como Jorge Saavedra:

Paulina Rojas: «Cuando el piloto dice que se tienen que sentar y poner los cinturones, efectivamente ahí es cuando Luli comienza a tener este encontrón con la gente. Ella estaba sentada más atrás. Pero cuando se levanta y va hacia esa cortina, ahí es cuando se produce este forcejeo con los tripulantes de cabina, que van y, para tratar de calmarla, la sientan en primera fila.

«Ahí es el video que ven, donde empieza una tripulación brasileña, que tampoco hablaban bien español como para entenderse bien. Cuando logra calmarse y el avión aterriza, todos querían bajarse, sacar sus maletas, etc. Y no podían, porque tuvieron que esperar que subiera gente, no sé si de la PDI o paramédicos, para primero ver a Luli y, para arreglar esta situación, porque es un protocolo de vuelo. La gente ya venia cansada».

La twittera Isidora Karmy Aninat mencionó en la red social de los 140 caracteres: «El colapso de Luli, para los que estábamos, fue muy desagradable. ¿Contaron que trató de abrir la puerta del avión? ¿En vuelo? ¡Loca de patio!».

En tanto, Nacho Gutiérrez consignó que «Luli intentó abrir la puerta en vuelo… Se saca cosas, empieza a tironear. Tengo entendido que decía, parece, que le iban a explotar los implantes, e iba a abrir la cabina».

«Si esto fuera una actuación, claramente condenable, tendría que ir a la cárcel. Así de grave es la situación», opinó Andrés Caniulef. Mientras que Gutiérrez comentó: «Imagínense un brasileño que venía, decirle una niña que le iban a explotar los implantes. Quería abrir la cabina del piloto, después trató de abrir la puerta del avión. Yo voy en el asiento y veo que alguien va a abrir la puerta, yo (realiza el gesto de agarrar a alguien del pelo y lanzarlo al suelo)».