Glamorama
Carlita Ochoa se confesó en Mucho Gusto. IMAGEN TOMADA DE PANTALLA / MEGA

El gran miedo de Carlita Ochoa con su hija adolescente

Autor: C. Z. / 26 julio, 2016

Carlita Ochoa tenía 16 años cuando conoció a Miguel Piñera, a mediados de los años ’90. Era un escolar que quedó deslumbrada con el que, por entonces, era el «rey de la noche» junto a su socio, Miguelo, en el pub Entre Negros.

Después comenzaron una relación que llevó a la pareja a las crónicas de la prensa roja, revistas y estelares. Carlita y Miguel eran inseparables. Sin embargo, el pololeo de siete años terminó muy mal en 2002, cuando la modelo reconoció públicamente que el padre de su hija recién nacida no era Miguel.

A dos décadas del inicio de la historia de Ochoa y Piñera, a ella le siguen preguntando por el tema, como ayer en el matinal de Mega. Allí, Carlita contó que uno de sus grandes temores es que su hija Josefa, hoy de 14 años, repita la historia que ella vivió. Es decir, que le guste un hombre muy mayor.

“Me da un nervio tremendo pensar que en unos años más podría aparecer con un pololo tan grande como yo lo tuve”, dijo la modelo en Mucho Gusto. Estas fueron las declaraciones de Ochoa sobre la historia de amor que la hizo famosa:

Rodrigo Herrera: “Cuando tú tenías 16, 17 años, el país se cuestiona lo mismo”

Carla Ochoa: “Estaba a punto de cumplir 18 años”

Lucho Jara: “¡La media diferencia!”

Herrera: “¿Qué le veías? O como dice ¡¿qué cresta le veías al Negro Piñera?!”

Carlita: “Pucha, qué lamentable que te tocó esa pregunta, habiendo tantas preguntas que me puedes hacer. Pero han pasado tantos años. La he respondido tantas veces…”

Jara: “Público, ¡¿responde la pregunta?!… Yo creo que, lamentablemente, vas a tener que inventar una respuesta”

Carlita: “Bueno, la respondí tantas veces en su momento. Pero bueno, yo era chica, y él siempre decía que él aportaba la experiencia y yo la inocencia. De todas maneras, sí, era re chica. Hoy día veo a mi Josefa y me da un nervio tremendo pensar que en unos años más podría aparecer con un pololo tan grande como yo lo tuve”

Jara: “¿Qué diferencia era de edad?”

Carlita: “Veinte y algo. Veintitrés. Por ahí”

Jara: “Pero puede ser Carla, para entender una relación tan mediática, ¿que había un deslumbramiento?

Carlita: “Sí, absolutamente. Yo jamás lo había visto. Yo sabía que era músico. Y lo conocí. Un hombre alegre, un hombre entretenido, un hombre con mundo. Y nada. Yo creo que me deslumbré, Luchito, como dices tú. Y al conocerlo con el tiempo, un hombre tremendamente cariñoso, tierno. Y en lo personal, a mí la ternura y el cariño recibido por un hombre, para mí, es tremendo”.