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De Moras contó el estrés que significa preparar tantos vestidos. FOTO: AGENCIA UNO.

La pesadilla de los vestidos del Festival de Viña

Autor: Andrés Cantuarias / Cristián Farías / 27 enero, 2016

El look de la animadora del Festival de Viña es una de las cosas más complicadas del certamen de la Ciudad Jardín. Los críticos nunca quedan conformes, o pueden ocurrir chascarros como cuando Carola de Moras salió al escenario con un pinche colgando de un mechón de pelo.

La actual animadora del Festival contó en el matinal de Canal 13 el estrés que significa preparar tantos vestidos, con tantos diseñadores –MIRE AQUÍ EL VIDEO-:

Jean Philippe Cretton: “El tema del vestuario ¿eso está regulado desde ahora? Porque también siempre llama la atención cómo están vestidos los animadores, sobre todo para ti, Carito”

De Moras: “Para mí es un tema el vestuario. Bueno, la Tonka, que también lo animó, sabe que los ojos están puestos sobre la animadora más que sobre lo guapo, estupendo, precioso que se va a ver mi compañero con todos los trajes de Sergio Arias”

Rafael Araneda: “Estoy claro que los ojos están ahí”

De Moras: “Pero es más difícil porque todas las noches tienen que ser diferentes. Tiene que ser agradable para la gente”

Tonka Tomicic: “Leí en el diario que eran hasta ocho horas de prueba”

De Moras: “Bueno, ayer me acosté a la una y media de la mañana, porque terminé de grabar en el canal tipo ocho de la noche y de ahí me fui a la prueba de vestuario. Porque cada vestido va al cuerpo y como son vestidos que hacemos con los diseñadores. Lo peor de todo es que tengo que estar parada, así, y me pichan. ¡Mira! ¡Estoy toda pinchá con los alfileres!”

Araneda: “La noche anterior a la gala…”

De Moras: “¡Pero no contí esa! ¡Cuenta la otra!”

Araneda: “La noche anterior a la gala andaba cansada y, además, le faltaba la mitad del vestido ¿Cómo se llama eso que va puesto?”

De Moras: “Unas plaquitas”

Araneda: “Eran como 2000 plaquitas y faltaban 1500 (risas). Entonces, comimos algo ‘¿y qué tení que hacer ahora?’. ‘Yo, dormir ¿Y tú?’. ‘Me tengo que ir a probar el vestido’. ‘Ya. Yo te acompaño un rato’. Nos fuimos a la pieza, esta otra pará, así, y yo me quedé dormido. De repente despierto y seguía”

De Moras: “Les pido que me cuelguen cosas del techo, o algo para poder agarrarme, porque es tanto lo que estoy parada…”

Tomicic: “¿Por qué no te mandas a hacer una maniquí con tus medidas?”

Araneda: “¡Eso!”

De Moras: “Tenemos, pero yo bajo de peso”

Araneda: “Baja, sube”

De Moras: “Tenemos uno, pero son siete diseñadores con los que estamos trabajando”

Tomicic: “¡Que el canal le compre el maniquí poh!’”

De Moras: “Nosotros somos humildes”.