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El sensible e íntimo momento del alcalde Rodolfo Carter

Autor: admin_copesa / 27 agosto, 2015

Uno de los personajes televisivos del año es la médium Vanessa Daroch, “la mensajera” de Mucho Gusto. Desde Alvaro Escobar a Lucila Vit han quedado impactados cuando la vidente los ha contactado con sus seres queridos que han fallecido. Esta vez fue el turno del alcalde de La Florida, Rodolfo Carter, quien participó en el “encuentro con el más allá” del matinal de Mega.

 

Carter tiene una pena: La muerte de su padre, víctima de la leucemia. El era un estudiante de Derecho de 24 años y su papá un hombre trabajador de 52. El deceso se produjo mientras Carter estaba a su lado, cuidándolo, de noche. Este fue parte del diálogo –MIRE EL VIDEO ACA-, ocurrido entre Daroch y el alcalde, que no paraba de llorar, cuando ella le traspasaba los mensajes del fallecido:  

 

Vanessa Daroch: “Necesita con urgencia pedirte perdón, pero siente que inconscientemente, te preparó para su partida. Tuviste que sacar fuerza de donde no sabías que había. Quiere que sepas que los errores que él cometió estando acá, los asume completamente.

 

“A él le faltó darte un abrazo fuerte. Ese abrazo de ‘ven pa acá todo va a estar bien’, y se fue con esa pena, con esa falta de decir ‘nada va a pasarte, aquí estoy yo’. Pero todo se dio para que tú siempre fueras el fuerte. De sentir que no necesitabas ese abrazo.

 

“Él no estaba preparado para partir, él quería hacer muchas cosas más. Él siente que la enfermedad que él llevó fue netamente por como llevó su vida. Y así lo describe. Él se culpa de haber trabajado tanto, de haber descuidado lo que más quería en la vida.

 

“Él sentía tu rabia. Esa impotencia de no poder gritarle ‘¿por qué?’, así lo sentía. Que en el momento que él no está, tuviste que transformar tu vida en un segundo. Dejaste de ser tú. Dice que él es culpable de tus miedos. Y de que, en cierta forma, le gustaría estar acá. Para estar a tu lado y guiarte. Como lo debería haber hecho.

 

“Y si él estuviera acá físicamente, él dice que te levantaría de esa silla y te daría un abrazo como diciendo ‘ven pa acá, cabro’. Te abrazaría, fuerte, fuerte, fuerte. Un abrazo muy poderoso alrededor tuyo, diciéndote que todo va a estar bien.

 

“Atrás de él hay una mujer que le tira las orejas, que lo guía. Tiene unos ojitos chiquititos muy brillantes, con eso dice todo. Ella no necesita hablar, son sus ojos…. ¿Tienes hijos?

 

Rodolfo Carter: “¿Yo? Que yo sepa, no” 

 

Daroch: “Porque ella dice ‘yo quiero ver al bisnieto’. Yo creo que eso es lo que ella necesita. ‘Yo quiero ver al bisnieto’, como exigiéndolo. Y lo da por hecho de que es hombre, dice ‘bisnieto’»

 

Daroch:  “¿Quién le besa las manos cuando él partió?”

 

Carter: “Yo”

 

Daroch: “Ese es su recuerdo, sus besos. Así… Es la conexión que él necesitaba. Ese adiós, no había palabras, sólo ese beso”

 

Carter: “Yo, yo… La verdad es que cambiaría todo lo que tengo por abrazarlo de nuevo”

 

Daroch: ”El necesita darte un abrazo y decirte que todo va a estar bien» 

 

Carter: «¿Dónde lo encuentro de nuevo, dónde lo veo de nuevo? ¿Dónde le puedo preguntar cosas?”

 

Daroch: «Cuando tú estés en un momento solo, háblale. Él te va a escuchar, no te va a contestar, no lo vas a escuchar cómo estamos hablando nosotros, pero vas a saber cuál es la decisión precisa que tienes que tomar, porque él te la va a hacer saber. Yo sé que lo vas a poder abrazar, no aquí, pero yo sé que lo vas a poder abrazar. Y va a ser algo mágico»

 

Carter: «Me hace mucha falta».