2091169.jpg

Animadores maltratados

Autor: admin_copesa / 22 marzo, 2015

A pesar del shock que causó el que Jean Philippe Cretton, la revelación del 2014, se quedara sin pantalla, y del cataclismo entre los rostros televisivos que provocó la salida de Fernando Solabarrieta de TVN, los animadores top dicen que siempre ha sido así. Que viven al borde del precipicio y pueden perderlo todo en un segundo. No es cosa de ahora.

 

“Toda la vida he sentido que quienes salimos en pantalla somos súper prescindibles y en cualquier minuto te pueden sacar. Nunca he tenido la sensación de que estoy segura”, confiesa Ivette Vergara. «Lo de Solabarrieta está un poco polémico, pero ha pasado desde siempre, es algo natural de la industria y de cualquier trabajo. Nadie tiene un puesto asegurado», concuerda Karla Constant. «Es lamentable y triste porque te has puesto la camiseta, has trabajado 22 años en un canal, creando lazos estrechos”, solidariza Julia Vial.

 

“Los canales tienen el justo y legítimo derecho de hacer la oferta que corresponde”, opina Martín Cárcamo. Mientras que José Miguel Viñuela asegura que “los rostros no tenemos miedo a esta industria televisiva, pero sí creo que está súper movida. Hay que hacer un análisis más profundo y ver por dónde pasan los gustos de la gente”.

 

Macarena Tondreau especifica que “cuando un canal baja el rating, se produce más movimiento. TVN ha estado un millón de veces arriba, como hoy está Mega”, refiriéndose al fenómeno de las teleseries turcas que desestabilizó a toda la pantalla chica, especialmente a la señal pública. Y Paty Maldonado sostiene que, en el caso de TVN, sus figuras están pagando los platos rotos, siendo que “la crisis es ejecutiva, no le echemos la culpa a los rostros. El canal necesita gente creativa que haga buenos proyectos”.

 

Julio César Rodríguez matiza con que “la figura de ese animador todopoderoso se acabó, porque la gente quiere a alguien cercano, sencillo, creíble”. Pero Cretton es más romántico y sostiene que “la industria de la TV debe dejar de lado la soberbia. No puede ser sólo números y quienes estamos delante de cámara debemos conectar con ese sentimiento, pero respaldados por un canal. Si te ven sólo como un número reemplazable, no se está entendiendo la esencia de conectar emociones”.

 

Eduardo Fuentes afronta la levedad de los lazos entre animadores y canales con un consejo para los colegas. “Hay que atinar y ahorrar, porque ganamos harta plata. Me parece más terrible la situación de inestabilidad de los equipos tras cámaras”, afirma, práctico –MIRE AQUI LA VERSION IMPRESA, EN EL DIARIO LA TERCERA. VAYA A LA PAGINA 127-.