Bienvenidos golpeó con remecedor reencuentro de madre que se desmayó en vivo al ver a su hijo
Ana Rosa Campos, una mujer de Rancagua, no creía lo que estaba presenciando en el set de Bienvenidos. Ricardo, el hijo a quien no veía hace más de 30 años, estaba frente a ella. El shock emocional fue fulminante. Se desmayó en pantalla. Tonka Tomicic, junto a Pancho Saavedra y parte del equipo de Bienvenidos, atinaron a sostenerla y dejarla en una silla. Ella le tomó la mano al hombre, y le dijo: “Pérdoname”.
La impactante escena ocurrió la mañana de este miércoles en el espacio Reencuentros del matinal del 13, y marcó un peak de 12 puntos de rating online.
Gracias a la ayuda de la PDI, pudieron contactar al hombre que vive actualmente en La Serena.“Hay un verdadero drama. Es una película lo que ustedes van a ver hoy día”, calificó Martín a los hechos que gatillaron la abrupta separación entre Ana y Ricardo, uno de sus tres hijos. Primero, hablaron de la vida de la madre. “Fue abandonada por sus padres a los 8 meses de vida. Se crió con una tía que nunca la quiso y al trató como empleada. Años después, la vendió por un quintal de harina”, explicó Saavedra.
Según Ana, a los 18 años quedó embarazada de Ricardo, tras una noche que pasó con un hombre en Santiago. Nunca más lo volvió a ver. Se fue a Rancagua. Luego, conoció a otra pareja, con quien tuvo a sus dos otras hijas. Sin embargo decidió separarse y los crió sola, por las constantes agresiones y humillaciones que sufría de él.
Después de eso, fue golpeada por la leucemia que desarrolló una de sus hijas. “Estuvo dos años en coma. Los médicos me dijeron que mi hija no tenía vuelta”, comentó Ana. Vendió su casa para pagar la deuda del tratamiento. Y se fue a vivir a la calle con ellos. Dormía en la plaza de armas de Rancagua. “Viví ochos meses allí. Tapaba a mí a mis hijos (Ricardo tenía 3 años y Leticia 8 meses) solo con dos frazadas”, añadió.
Fue en ese momento cuando le quitan a Leticia, por culpa de una enfermedad que adquirió la pequeña. La trasladaron a un hogar de Coanil. Al tiempo, se fue a vivir a la casa de un hombre que le ofreció asilo. Allí dejó a Ricardo, mientras trabajaba en una frutícola, para obtener recursos, Pasó mucho tiempo lejos de su hijo. Un día, cuando regreso, Ricardo ya no estaba. La persona que la acogió se lo llevó a Santiago y nunca más volvió a verlo.
Con Leticia pasó lo mismo. Tampoco la volvió a ver. “En Coanil me dijeron ‘su hija hace más de dos años que no está aquí. Se fue a Australia’”, dijo la mujer, quien solo se quedó con su Ana María, quien terminó por superar la leucemia.
Recién supo de Ricardo cuando este cumplió 18. El hombre que la alojó, y se lo llevó a Santiago, le reconoció que el “vivía en Punta Arenas” y que “ya no era su hijo”. “Me siento culpable de no haberlos cuidado. Me confié en personas que no debía haber confiado. Les digo (a sus hijos perdidos) que me perdonen, y que los amo”, reconoció Ana, con autocrítica.
La historia sorprendió a Ricardo, presente en el set del matinal, quien finalmente accedió a reencontrase con su madre, reconociendo que la “perdonó”. “Le doy las gracias”, contestó la mamá, para luego reunirse con él en una sobrecogedora escena.
El reencuentro dejó perplejos a los presentes en el set del programa. “Fue impresionante, porque cuando ellos se encontraron frente a frente, yo no sabía qué realmente estaba pasando, si se iban a querer abrazar o no. Y ella, como le pedía perdón, fue heavy”, reconoció Pancho Saavedra en conversación con glamorama.latercera.com.
“Después se fueron a una oficina a conversar, y lo que sé es que iban a almorzar juntos y que finalmente esto dio para una conversación”, añadió Pancho.
