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Pamela Jiles se quebró

Autor: admin_copesa / 1 abril, 2015

Sí, Pamela Jiles tiene corazón. La “abuela” lloró por primera vez en televisión, en 42 años de carrera, como dijo ella misma en el matinal de Canal 13.

 

Llegó hasta Bienvenidos porque en el programa Intrusos no la dejaron despedirse en pantalla, luego de que venciera su contrato con La Red y no renovara, tal como lo adelantó glamorama.latercera.com a principios de marzo. Es decir, el fin de semana, Jiles se quedó sin pantalla.

 

En cambio, en el matinal de la señal de Luksic, Tomicic, Cárcamo y Ramírez la recibieron con los brazos abiertos. «Le tengo cariño a mi ex empleador. No me gustaría, porque el decoro para mí tiene un valor altísimo, no quiero pelar, por el cariño que les tengo”, dijo Pamela –VEA EL VIDEO AQUI-.

 

Agregó: “Pero la verdad, y hay documentos al canto, es que yo presenté la renuncia a La Red en julio pasado, cuando se terminó una sección pequeñita, que ustedes vieron, que se llamaba Chile a Prueba de Jiles, que llevaba a La Red de los dos puntos a los nueve (de rating), que es algo así como unos 30 puntos para Canal 13″, explicó. Y vino el momento sensible.

 

Martín le pidió que aprovechara el espacio para despedirse de sus “nietitos”, la legión de seguidores que tiene la periodista en su cuenta de Twitter @PamJiles. «Es que sé que me va a dar pena y, en los 42 años que llevo en televisión, jamás he llorado en pantalla», aseguró. Cárcamo insistió y Jiles accedió.

 

Entonces, a la abuela se le pusieron los ojos llorosos. Apenas podía sacar la voz. Le costaba continuar y, finalmente, se quebró. Este fue su discurso:

 

«Nietitos lindos: yo traté hasta lo último de poder despedirme de ustedes. Di todas las garantías para poder estar el último día donde ustedes me habían seguido durante tanto tiempo, para poder decirles simplemente que la abuela los quiere, que pueden contar conmigo cada vez que lo quieran, que los amo de verdad, que no me interesa ser simpática, ni caerle bien a nadie, más que a ustedes. Y que tengo mucha pena de no poder estar junto a ustedes de nuevo, encontrándonos como todas las mañanas. Un besito para todos».