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La fuerte confesión íntima de Claudio Narea sobre su relación con Jorge González

Autor: admin_copesa / 29 mayo, 2015

Una cosa es que lo escriba en un libro y la obra es que lo diga en un estelar como Vértigo. El guitarrista Claudio Narea insinuó anoche que Jorge González es gay y afirmó que el cantate está, más que enamorado, obsesionado con él desde que eran niños.

 

El ex integrante de Los Prisioneros asegura que por esto González destruyó su matrimonio y ahora intentó hacer lo mismo con la segunda relación de Narea. Y la cosa se puso aún más fuerte cuando Cecilia Bolocco le pidió al guitarrista que mirara a la cámara y le enviara un mensaje a Jorge. Narea lo hizo –VEA AQUÍ EL VIDEO-. Este fue su testimonio en la sección Muro de la Verdad del estelar de Canal 13, donde le preguntaron si es que intentó acercarse a su ex amigo ahora que él estuvo muy complicado de salud:

 

“Es muy compleja la historia nuestra y he preferido mantenerme al margen. Pero no solo yo. Todos los que participamos de Los Prisioneros actuamos de la misma forma, tanto Miguel como nuestro mánager miramos con distancia. Yo debo tener la historia más fuerte con Jorge… El año pasado yo le escribí un correo a él, porque en la historia de Los Prisioneros siempre pasan nuevas cosas, entonces yo le escribí, alguna vez le escribí hace algunos años, pero quería saber qué me contestaba.

 

«Le puse  varias cosas que habían pasado en los últimos años y también le escribí… El correo decía cosas duras, en el fondo podría haberme dicho ‘mira, yo no tengo nada que ver con eso’. Podría haberme dicho ‘mira, esto sí, juntémosnos a conversar’. Le puse cosas de los Seudopillos, de cuando éramos chicos también. O sea, en el fondo, le decía yo ‘¿en qué momento te perdiste?’.

 

«Yo pensaba que no me iba a contestar, pero me contestó. Me contestó al poco rato, diciéndome que con una rápida mirada de todo lo que yo le escribí supo que nada tenía que ver con él, por lo tanto no lo leyó. También le puse cosas más… Cosas más relacionadas con nuestra historia… Que si él hubiese sido sincero cuando teníamos 15 años, 16 años, yo podría haber seguido siendo su amigo.

 

«(Somos amigos desde los) Trece, catorce años… Es que esos son problemas normales, problemas de pelearse por tonteras. O sea, me peleo porque, no sé, por cualquier cosa, pero este es un problema más profundo, porque él se entromete en mi vida siempre, y lo hace… Mucha gente dice que él es un genio, bueno, también es un genio para hacerlo sin que se note. Entonces a eso le hacía referencia en el correo, y también diciéndole que si él hubiese sido sincero cuando yo estaba chico, porque yo sé que yo fui su mejor amigo. Yo lo sentía como mi mejor amigo, pero yo dudo que él sintiera lo mismo.

 

“Lo que puedo decir cuando di entrevistas, cuando lancé el libro, en septiembre pasado, dije que yo sabía que él estaba mal, que estaba enfermo, no sabía qué tenía, pero la historia nuestra, si uno la examina, si uno reflexiona sobre esta historia. Por ejemplo, si se hubiesen leído el libro, porque saqué el libro e inmediatamente empiezan a atacarme ciertos periodistas como si fuera una tontera, siendo que la real tontera es que crean que nos separamos por una mujer. Esa es la historia tonta de este asunto, no nos separamos por una mujer. Nos volvimos a juntar el 2011.

 

“Es una cosa conocida que Jorge se metió a las drogas, vivió un poco la cosa de la estrella del rocanrol. Yo no lo hice, me casé muy joven y viví una vida bastante normal. Mientras éramos famosos yo me iba a mi casa después de los shows y no había rocanrol, no había drogas, nunca me emborraché ni nada, fui papá muy joven. El vivió lo opuesto. Cuando efectivamente dicen que es la causa de nuestra separación, o sea que él se involucra con mi ex mujer, en esos momentos pensé que él estaba enamorado y que yo estaba sobrando, que suele pasar en muchas familias, pero pasa el tiempo y la cosa se empezó a poner mucho más oscura.

 

“El estaba tratando de romper mi relación. Desde que yo empiezo a pololear con Claudia él empieza aportarse raro, empieza a decir cosas raras. Pasa el tiempo, él se pone un poco loco…

 

Cecilia Bolocco: “¿Celoso porque sentía que te perdía, porque tú tenías esta otra relación?”.

 

“Claro, yo creo que es eso. Sí. Yo creo que nuestra relación de amistad era muy estrecha. Por ejemplo, nosotros grabábamos Los Seudopillos. Grabamos 150 canciones ante de haber grabado con Los Prisioneros, pero canciones a capella. Hacíamos canciones con Jorge sin instrumentos, no sabíamos tocar nada, entonces nuestra relación de amistad viene de los juegos, de reírnos, desde mucho antes de saber tocar instrumentos.

 

«Cuando empezamos a tocar y nos hicimos conocidos, nosotros con Miguel éramos Los Prisioneros, pero con Jorge, sin Miguel, llevábamos diez canciones de un grupo que se llamaba Gus Gusano, que eran como rockabilly. Chistosas también, siempre el humor era lo más importante. Hacíamos historietas también, en cada gira estábamos haciendo historietas juntos. Podría publicar un libro con las historietas, porque son muchas.

 

“Se agravó la cosa.  Lo que digo, lo que le dije en el correo en ese momento, era ‘si tú me hubieses dicho cuando teníamos 15 años que sentías algo distinto por mí, podríamos haber seguido siendo amigos, pero yo, pasan los años y él trata de romper de otra forma, un poco burda, mi segunda relación”.

 

Bolocco: «¿Tú quieres insinuar que él se habría enamorado de ti?»

 

«Es una obsesión, no digo que sea amor».

 

Bolocco: «¿Y tú qué sientes por él?»

 

“Yo guardo buenos recuerdos por esos momentos que te digo. Si fuesen cosas malas, yo hubiese botado esos cuadernos de historietas o no estaría recordando los Seudopillos. Yo creo que Jorge hace muchos años viene gritando, en sus canciones, no vamos a hablar del Baile de los que Sobran, hablemos de las otras canciones, las canciones que no se conocen mucho, viene gritando lo que le pasa. Le pasa algo grande algo fuerte, algo que es difícil y seguramente no lo supo llevar y por eso tal vez entró en las drogas.

 

“En base a la verdad muchas cosas se pueden recomponer, pero cuando… Por ejemplo la respuesta de él a ese correo fue que, con una rápida mirada, supo que lo que yo escribí no tenía nada que ver con él. Entonces yo pensé ‘¿a quién le escribí?’. Me dijo ‘no lo leí’. O sea, lo miró, cachó que no tenía nada que ver con él y no lo leyó. No sé por qué me respondió, entonces.

 

“Quiero vivir una vida tranquila, hacer mi música tranquilo y él puede hacer lo mismo… Juntarnos Los Prisioneros me resulta difícil. Hay mucha gente que me decía todavía que porque no nos dejamos de tonteras, nos tomamos una cerveza y nos juntamos. Ojalá fuera así, porque para mí Los Prisioneros del año 89 se transforman en una pesadilla y después, bueno, la gente que ha leído mi libro, le gusta, sabe que estoy contando la verdadera historia de Los Prisioneros.

 

“A propósito de su salud, por supuesto que me sorprendí, pero no tanto, porque en la historia que relato en el libro se ve que la cosa no va bien, porque es una historia que no ha acabado, seguía hasta el año pasado. Cuando termina el libro seguían pasando cosas, por algo yo le escribí a Jorge”.

 

Bolocco: «Imagínate que está ahí Jorge mirándote, háblale a él, ¿qué le dirías?»

 

«Yo creo que fuimos, yo sentí que eras mi mejor amigo. Tú sabes, hicimos muchos proyectos, aparte de Los Prisioneros, muchas risas, muchos viajes, muchos discos escuchados juntos, y en algún momento todo cambió… Yo sé por qué… Yo creo que te haría muy bien vivir la vida con la verdad, sin tener digamos que andar mandando mensajitos en canciones, o haciendo cosas más truculentas para darme a entender lo que finalmente entendí. O sea, la historia de Los Prisioneros no se trata de esa tonta historia de Corazones, del trío amoroso, porque esa no es la historia.

 

«Le diría eso, que mejor se vive la vida con la verdad, y que por supuesto si algún día él quiere hablar… Yo creo que si yo le escribí un correo, fue para que me lo respondiera bien, y lo que yo le decía ahí, no dije todas palabras que le puse.

 

«El podría haberme dicho ‘mira, sí, esto sí; esto no poh, cómo se te ocurre, pero juntémosnos a conversar, aclaremos las cosas’. Yo le decía hartas cosas importantes, y hoy día con su intento de romper mi segunda relación es donde yo digo: todas las cosas que alguna vez me dijo desde que éramos chicos, se entendían. Todas esas cosas raras que nunca entendí, las entendí con ese intento por romper mi relación