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Coco Legrand criticó a León Murillo y su rutina con garabatos en el Festival

Autor: admin_copesa / 4 marzo, 2015

Si hay alguien que puede opinar con autoridad de una rutina humorística en el Festival de Viña es Coco Legrand. Arriba de la Quinta Vergara lo ganó todo. Su último show fue en 2010, con un éxito rotundo. Y ahora, mira de reojo a los comediantes que se atreven a subir al escenario del certamen para enfrentar al “Monstruo”.

 

En esta última edición, su mirada estuvo atenta a León Murillo, quien salió triunfante de la Quinta, con Gaviotas de Plata y Oro. Pero no salió del todo aprobado. Coco lo criticó porque se le pasó la mano con el uso de garabatos en su rutina.  

 

“A lo mejor el mismo deseo de tener un triunfo rotundo, rápido, instantáneo, como el Nescafé, lo llevó a tener que recurrir a mucho garabato, a mucha palabra fuerte”, opinó Coco en Intrusos, de La Red. 

 

Luego agregó: “Hay palabras que son fuertes. Acá en Chile, por ejemplo, decir ‘culo’ molesta, pero es una palabra muy castiza. En España dicen: ‘pone tú el tapete este para que el culo de la botella no marque la mesa’. Pero después hay otra palabra, que también empieza igual… Culi… y termina con otra terminación, y esa fue la que yo encontré demasiado fuerte porque, además, es un acto que explica que la acción es trasera. A ver si me hago entender…”.

 

Para Legrand, el uso de garabatos fue el punto bajo en el show de Murillo. “No me refiero en nada en particular. Hay muchas palabras que siento que fueron fuertes. A mí no me causa ningún problema, pero yo no ocuparía palabras tan fuertes”, añadió el humorista.

 

Murillo, consultado por Intrusos, respondió. “Coco tuvo la gentileza de llamarme, con unas palabras que me dejaron en el cielo”, comenzó diciendo. Tras eso, sentenció: “Tiene toda la razón. Tiene toda la razón, si yo soy un ordinario más. Para qué me invitan si saben cómo me pongo. Si la culpa no es de ellos, obvio. ¿Soy ordinario? Soy ordinario. Siempre grosero, nunca vulgar”. 

 

El comediante, en tanto, defendió el uso de este tipo de palabras. “Entiendo que a mucha gente le causa escozor escuchar ciertas palabras. A mí, en lo personal, me agarro de (Roberto) Fontanarrosa cuando habla de las malas palabras. ¿Por qué son malas palabras? ¿Por qué cuando uno las usa pierden valor? ¿Son malas palabras porque le pegan a las palabras más chicas? ¿Por qué son malas palabras? Son palabras, nada más, que se ocupan en determinadas circunstancias. Yo las ocupo, las necesito y las defiendo”, concluyó León.